Obras Rugby no pudo con VILO, su clásico rival, y cayó por 44 a 21 en el bajo de Vicente López, por la sexta fecha del Grupo III de la URBA. Fue una jornada en la que se respiró rugby desde muy temprano, primero con el encuentro de las infantiles, entrenando a la par y jugando mini partidos en distintas canchas reducidas. Participaron desde la M-7 a la M-12 con los chicos del club local.
En cuanto al juego, la Primera arrancó con un ritmo arrollador, parejo en el juego y en el marcador, luchando de igual a igual con el equipo hasta ese momento puntero de la zona. Escasos nueve puntos los separaban al finalizar el primer tiempo, que finalizó 22-13. En el segundo tiempo, la diferencia principal hasta el final estuvo en la defensa aurinegra, que no anduvo para nada precisa en el tackle y le faltó agresividad para neutralizar algunas de las individualidades de VILO. Al no encontrar resistencia, en rival pudo desarrollar su juego haciendo retroceder a Obras y complicando mucho.
El aurinegro supo dominar cuando pisaba el acelerador en ofensiva, pero su problema, además del tackle, fue la constancia. Levantó el pie del acelerador y no pudo mantener la potencia.
En la Primera se destacaron el capitán Emiliano Benavente, octavo aurinegro, Hernán Molinari, pilar, y el segunda línea Federico Badino.
Este resultado dejó a Obras en el quinto lugar de la general, ubicado así en la última plaza para poder clasificar a la segunda rueda por el ascenso al Grupo II para 2018, faltando tres partidos aún para el cierre de la misma.
La Intermedia también sufrió ante VILO: fue derrota por 34-24. La historia fue pareja durante gran parte del desarrollo y se definió en los últimos cinco minutos.
La “intergaláctica” jugó un partidazo que fue construyendo de menor a mayor. Comenzó perdiendo por dos tries casi consecutivos, lo que entregó la sensación de que la superioridad de los locales iba a ser absoluta. Sin embargo sonó el despertador, el equipo reaccionó con sus delanteros y se dio cuenta que podía ganar esa batalla, tanto en el scrum como en el maul. Con eso alcanzó para repuntar en el marcador y someter a VILO durante el resto del primer tiempo y casi todo el complemento.
El hecho de no abrir más la pelota hacia las puntas, donde Obras también tenía supremacía a través de las destrezas individuales de sus backs, y los cambios apresurados en la alineación hicieron que el partido se escapara sobre el final.
El segundo equipo de Obras tuvo como figura a su apertura Sergio Pérez Scianca, quien marcó siete de los 24 puntos del equipo. El “Maestrico” tuvo una tarde inspirada con sus dos pies y jugó un rugby inteligente y áspero.