La colonia 2016-17 tuvo una superación en la cantidad de inscriptos a lo que venía acostumbrado. En esta oportunidad, la barrera de 90 chicos se rompió y esta vez llegó a 155. La diferencia con otros años fueron las edades, en esta ocasión hay muchos más nenes grandes. Anteriormente, los participantes eran de entre 3 y 6 años, y en la actualidad se agrandaron los grupos de los chicos entre 11 y 12 años. “Nosotros hace ya un tiempo que queremos apuntar a una colonia más adolescente y no se nos daba por un tema de edades. Hoy podemos ver que los más grandes nos eligen”, comentó Andreina Mazzaccaro, directora de la colonia.
Diciembre difiere mucho de lo que es enero y febrero, porque generalmente los grupos se arman en dos edades: en enero cada grupo respeta su edad, los de tres años se dividen en dos grupos, en los que cumplen de enero a junio y los que cumplen en la segunda mitad, uno de cuatro, cinco, otro de cuatro y cinco, de seis, siete, ocho, nueve y diez, y otro de once, doce y trece. Por un lado está la colonia tradicional, que posee natación, multideportes y actividades más recreativas como cocina, teatro, plástica, sumado a los talleres dictados por profesores especializados en la materia de karate, básquet, tenis y tenis de mesa. Por otro lado, a partir del año pasado se agregó otra modalidad, la colonia de futbol y esté año se mantuvo y la cantidad de nenes aumentó, por lo que se dividieron las edades en 3 grupos, de 6 y 7, 8 y 9, y otra de 10, 11 y 12 años.
“El perfil deportivo, si bien se hace hincapié en la parte más bien lúdica y recreativa, tiene una orientación al deporte. Nuestro objetivo no es la cantidad de chicos sino la calidad de lo que nosotros ofrecemos, no es una colonia masiva, por lo que la atención es más especializada, los grupos son reducidos y esto genera una confianza mayor en los padres que conocen a profes que trabajan con sus hijos”, agregó Andreina.
Hasta hace unos años atrás, la mayor cantidad de chicos que asistían a la colonia eran los más chicos, por una cuestión lógica, los papas continúan trabajando y en ese horario los chicos iban al jardín, en cambio, ahora aumentó la cantidad de chicos más grandes, que es algo más difícil de conseguir porque es una edad donde pueden ir al club, a la pileta o juntarse con amigos y la colonia pasa ser pasado. Los chicos se divierten mucho por lo que eligen seguir viniendo.
En edades tempranas la colonia suele ser por necesidad de disponibilidad de los padres y cuando van creciendo la elección es el determinante de la continuidad. Andrea Corso, coordinadora de la colonia, destacó: “Creció mucho la confianza de los padres en nosotros, tenemos muchos colonos fieles, que confían ciegamente en nosotros que van sumando grupos por recomendación de experiencia, y eso es garantía del buen trabajo de cada uno de los profes, los chicos más grandes quieren seguir viniendo aunque ya se hayan pasado de la edad de colonia”.