Como es costumbre, Obras apuesta muy fuerte desde las bases al desarrollo del ajedrez. Es por eso que creó la Escuela de Desarrollo de alto rendimiento para ocho chicos con gran proyección: Pedro y Enzo Repetto, Gonzalo Moro, Lucas Marino, Eitnat Irigaray, Valentina Grosso, Valentín Irigoyen y Camilo Minoyetti.
Los chicos fueron seleccionados por el profesor Mario Tejera y las clases están a cargo del Gran Maestro Salvador Alonso, jugador del equipo aurinegro en la Liga Nacional. El trabajo consiste en darles las herramientas necesarias para fortalecer y avanzar en los campeonatos infantiles hoy, pero también pensando en su futuro como juveniles. Fortaleciendo las convicciones con el juego en edades más tempranas crecerá la posibilidad de que esto se sostenga en el tiempo.
Ya con un par de clases encima, Alonso reflejó su punto de vista sobre este nuevo proyecto.
-¿Cómo ves esta iniciativa y como la estás llevando a cabo hasta ahora?
-Recién empezamos. El curso tiene la idea de apuntar a los chicos de nivel más alto del club para que compitan en los torneos más fuertes del país. La verdad que es una movida muy interesante y creo que va a tener éxito, aunque estos proyectos siempre son un poco a largo plazo.
-¿Cómo los ves a ellos?
-Hasta ahora bárbaro. El nivel de los chicos es muy alto, son muy participativos. Les gusta mucho el ajedrez. Recién nos estamos conociendo, pero estoy gratamente sorprendido por sus capacidades.
-¿Cómo se enseña a chicos de esta edad?
-La forma de enseñar tiene que ver con el nivel de los chicos, pero siempre hay que emparentar la enseñanza con el hecho de jugar. Me parece que eso es muy importante. A esta edad, ellos quieren jugar, es lo que les gusta. Mientras se juega también se pueden corregir cosas y aprender.
-¿Qué tienen en particular ellos ocho para formar parte de esta escuela?
-Ellos venían trabajando con Mario y se eligió a los que tenían mejor nivel. Supongo que mucho se desprende de los torneos que pudieron jugar. Para mí, la elección está muy bien hecha. Al ser un grupo reducido y homogéneo es más fácil hacer un trabajo de proyección.
-¿Te sorprende la recepción de los conceptos de algunos chicos? Recién, durante la clase, veíamos que están alertas para resolver determinada situación.
-Sí. Se nota que hay muchos que tienen una gran facilidad y buenos golpes de vista, siempre teniendo en cuenta la edad que tienen. Me sorprende como se ubican rápidamente en la posición y sacan las jugadas o proponen otras ideas. Es muy interesante poder mantener ese diálogo ajedrecístico para ver qué es lo que piensan ellos y qué es lo que pienso yo. En esa discusión también está presente la enseñanza. Baso mi trabajo mucho en esas cosas, no me gusta bajar una línea totalitaria.
-¿Qué valores transmite el ajedrez más allá de lo deportivo?
-El ajedrez no los hace más inteligentes, sino que los ayuda a estructurar el pensamiento lógico. Eso sirve para muchas otras cosas. La planificación, el no apurarse a tomar una decisión… Hay muchas cuestiones que después te terminan ayudando en la vida como, por ejemplo, a no ser tan ansioso.